Me contaron una vez que hay personas que mienten tanto que acaban creyendo sus propias mentiras... Entonces pensé, que si sonreía tantas veces al día, tal vez acabaría creyéndome mi propia felicidad.

3 de septiembre de 2011

Siempre se deja escapar lo que más se quiere.



- Esto… - carraspea un poco-. Buenas noches… Por nada del mundo habría querido interrumpir esta fiesta…
Un chico del público lo estaba deseando.
- Muy bien, así se habla, ¿por qué no te vas entonces y nos dejas seguir bailando?
- Porque un día podría sucederte a ti. O a ti. O incluso a ti… - señala a varias personas -. Porque puede que una mañana te levantes y te digas que estás echando a perder tu vida, que te des cuenta de que tenías algo maravilloso y que lo estás perdiendo… Y no puedes permitirlo. No puedes seguir sufriendo en silencio y vivir una vida vacía e inútil. Porque cuando conoces a la persona adecuada, la especial, la única, esa que sabes que nunca nadie podrá sustituir, entonces debes hacer un esfuerzo por reconquistarla. Incluso subir a un escenario e interrumpir la sesión de un disc-jockey, parar la música y hacer que suene tu corazón. ¿Os habéis enamorado alguna vez, os ha sucedió no pensar en otra cosa que en él o ella, desear con todas vuestras fuerzas ver a la otra persona, pasar tiempo con ella, poder tenerla? ¡A mí me está ocurriendo ahora!
Un tipo grita dese abajo y abraza a una chica, que se ríe con él mientras se besan.
- ¡Cómo nosotros!
- Se ve que tienes más suerte que yo. Era mía y yo era el hombre más feliz de este mundo, pero la dejé escapar

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